Del 9 al 14 de octubre.-
DIOS CREÓ el mundo a través de Su Palabra, pero hizo el hombre y la mujer con sus propias manos. Adán y Eva tuvieron hijos y llenaron la tierra. El tiempo pasó y Dios observó que las personas andaban más preocupadas en satisfacer complacer sus voluntades de que agradar a Él, y eso apartaba cada vez más las a la humanidad de Dios. Por causa de eso, el pecado comenzó a dominar el corazón de las personas tornándolas más violentas. Hasta que Dios se arrepintió de haber creado al hombre y resolvió destruir todo. Pero observando la Tierra, Él encontró a un hombre fiel y justo, el único en el medio de aquella generación perversa. Su nombre era Noé, un hombre correcto que obedecida a Dios en todo. Imaginen la satisfacción que fue para Dios encontrar alguien que vive en comunión con Él y Lo amaba de verdad.
Dios dijo a Noé: Construye un grande barco con tres pisos, puertas y ventanas, y, cuando esté listo, coloca en él un par de cada especie de animal. Entrara también en la arca tu, tu mujer, tus tres hijos, y las mujeres de tus hijos. Y siete días después de que entren en la arca derramare una fuerte lluvia sobre la tierra.
Noé hizo lo que Dios había ordenado. Después que é, su familia entraron en la arca, Dios cerró la puerta y nadie conseguía abrirla, ni por dentro ni por afuera, cuando de repente, comenzó a llover fuerte y rápidamente inundó todo.
Niños, imaginen como aquellas personas deben haber quedado desesperadas queriendo protegerse. El agua comenzó a subir llevando todo lo que estaba por delante. ¿Cuán grande debe haber sido el desespero de las personas, no es cierto? El diluvio duró cuarenta días, y la lluvia cubrió hasta los montes más altos de la tierra.
Después que la lluvia paró, Noé se quedo mas algunos días esperando a que el agua baje y, así que salió del arca, él construyó un altar de piedras y ofreció un sacrificio al Señor. Dios recibió con mucha alegría la oferta, hizo alianza con Noé y prometió nunca más destruir la tierra con las aguas del diluvio. ¿Y saben cuál fue la señal de la alianza? (Espere la participación de los niños). ¡El arcoíris! Dios colocó en el cielo un arcoíris como símbolo de esta alianza. ¡Qué maravilla! Clase, en la Biblia está escrito así (abra la Biblia en el versículo) “¡Cuán bienaventurados son los de camino perfecto, los que andan en la ley del SEÑOR!”. Noé vivía de acuerdo con Dios y por eso fue escogido para construir el arca. Su obediencia hizo con que él salvase a los animales, su familia y a sí mismo.
Dios dijo a Noé: Construye un grande barco con tres pisos, puertas y ventanas, y, cuando esté listo, coloca en él un par de cada especie de animal. Entrara también en la arca tu, tu mujer, tus tres hijos, y las mujeres de tus hijos. Y siete días después de que entren en la arca derramare una fuerte lluvia sobre la tierra.
Noé hizo lo que Dios había ordenado. Después que é, su familia entraron en la arca, Dios cerró la puerta y nadie conseguía abrirla, ni por dentro ni por afuera, cuando de repente, comenzó a llover fuerte y rápidamente inundó todo.
Niños, imaginen como aquellas personas deben haber quedado desesperadas queriendo protegerse. El agua comenzó a subir llevando todo lo que estaba por delante. ¿Cuán grande debe haber sido el desespero de las personas, no es cierto? El diluvio duró cuarenta días, y la lluvia cubrió hasta los montes más altos de la tierra.
Después que la lluvia paró, Noé se quedo mas algunos días esperando a que el agua baje y, así que salió del arca, él construyó un altar de piedras y ofreció un sacrificio al Señor. Dios recibió con mucha alegría la oferta, hizo alianza con Noé y prometió nunca más destruir la tierra con las aguas del diluvio. ¿Y saben cuál fue la señal de la alianza? (Espere la participación de los niños). ¡El arcoíris! Dios colocó en el cielo un arcoíris como símbolo de esta alianza. ¡Qué maravilla! Clase, en la Biblia está escrito así (abra la Biblia en el versículo) “¡Cuán bienaventurados son los de camino perfecto, los que andan en la ley del SEÑOR!”. Noé vivía de acuerdo con Dios y por eso fue escogido para construir el arca. Su obediencia hizo con que él salvase a los animales, su familia y a sí mismo.
Conclusión: Noé vivió feliz sobre la tierra con toda su familia. Ellos se multiplicaron y fueron llenando, y llenando toda la tierra, hasta que fue poblada nuevamente. Nosotros también debemos ser irreprensibles delante de Dios, o sea, vivir en una vida correcta que Le agrade. Debemos vivir sin tener nada que nos acuse, y eso solo ocurre cuando somos obedientes y practicamos la Palabra de Dios. ¡Quien aquí va a vigilar para que se comporte correctamente diga “yo”. ¡Que así sea!
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